El submarino

Se hacen varios equipos, con un mínimo de 5 ó 6 componentes. Se sitúan en los diversos extremos de un campo de fútbol. Los componentes de cada equipo se colocan en fila, con los ojos vendados (excepto el último) y con las manos sobre los hombros del siguiente. El último es quien dirigirá el submarino, mediante unas señas conocidas por todos los componentes, de modo que deben intentar "hundir" a otros submarinos. Un submarino queda hundido cuando uno de sus componentes es tocado por un torpedo enviado por otro submarino. Los torpedos se lanzan con una señal determinada, y el individuo del extremo del submarino sale corriendo en línea recta, hasta que contacta con un submarino y lo hunde.
Cuando se hunde un submarino, éste queda eliminado, y se debe retirar del juego. Los directores del juego han de estar atentos para evitar trampas.
Las señales que pueden emplearse son:
- un toque en un hombro: desviación en esa dirección.
- dos toques en ambos hombros: acelerar la marcha.
- un toque en la cabeza: disparar torpedo.
Lógicamente cada equipo emplea las señales que quiera.
Se penalizará si alguien habla: solo pueden dirigirse los submarinos con las señales convenidas.